Los terrarios son una de las materializaciones más evocadoras de los jardines posibles. En un aparente encierro de cristal formamos micromundos donde las plantas que conviven ahí dentro son altamente compatibles y crean paisajes por sí mismos.
De entre las opciones de terrarios, los de plantas desérticas son muy especiales; además de prácticos, ya que las cantidades de agua que requieren este tipo de ecosistemas son ínfimas.
Consejos para crear un terrario sencillo:
- Al fondo coloca una capa de piedras.
- La siguiente capa deberá de ser de carbón vegetal. (Ayudará a limpiar el agua y la tierra).
- La siguiente capa debe ser un poco más gruesa que la anterior y deberá ser de musgo esfagnáceo.
- Finalmente la última capa, y la más gruesa de todas, llénala con tierra.
- Coloca algunas piedras y entiérralas en la superficie junto con las plantas (cactus o plantas que requieran poca agua).
- Riega tu terrario un par de veces a la semana.